- La concejala de Infraestructuras y Servicios Básicos, Ana Rivas, agradece a la ciudadanía la colaboración y anuncia nuevas acciones para continuar con el ahorro de agua
Las medidas contra la sequía emprendidas desde la concejalía de Infraestructuras y Servicios Básicos que dirige Ana Rivas han comenzado a dar sus frutos, que se traducen en un ahorro del 5% en el consumo de agua en solo un mes. La edil socialista ha agradecido la colaboración de la ciudadanía ovetense y ha anunciado nuevas acciones como el cierre de una quincena de fuentes de agua potable y ornamentales sin circuito cerrado y lavaderos.
La presentación de las medidas ha tenido lugar en Villafría, donde los técnicos de Aqualia han procedido al cierre de una fuente y un arroyo. Estas medidas se producen tras haber analizado los puntos negros de mayor consumo de agua, como fuentes ornamentales o lavaderos, con consumo excesivo por fugas o porque el caño vierte agua continuamente. En algunos casos, el cierre será permanente, hasta el final de la sequía, y en otros, se reabrirán las fuentes tras la reparación de fugas o la instalación de pulsadores para que no corra el agua cuando no se consume.
“Tengo que agradecer especialmente la colaboración ciudadana -ha indicado Ana Rivas- porque continuamente y ahora con más agilidad nos informan de fugas, de lugares en los que se puede cerrar el agua o haciéndonos propuestas para mejorar». La edil socialista ha enumerado también las medidas que el Ayuntamiento de Oviedo ha puesto en marcha para reducir el consumo de agua. «En primer lugar se utilizó para el baldeo de las calles la reserva de agua no potable del nuevo depósito de El Cristo que habíamos llenado para hacer los pertinentes análisis y también se usó para reponer fuentes ornamentales de circuito cerrado; se redujo el caudal de agua del riego, no los días, pero sí la cantidad de agua; se redujeron los baldeos a una vez por semana y no dos y los riegos salvo en la zona de flores y se acometió una campaña, que sigue en marcha, con consejos a la ciudadanía. Ahora hemos estado estudiando el consumo de las fuentes y en aquellos ‘puntos negros’ detectados hemos optado por apagar o regular el caudal».