• El Grupo Socialista alerta de que la situación va de mal en peor y exige un control municipal constante para garantizar la calidad del servicio

El Grupo Municipal Socialista advierte que la situación que vive el albergue de animales es muy preocupante y los incumplimientos de la empresa cesionaria parece que no han desaparecido. La ‘tutela’ del concejal de Nacho Cuesta sobre el asunto no ha mejorado en nada la situación de un servicio que era modélico desde que en 2017 se introdujeron cambios muy relevantes en el servicio. La pésima gestión del señor Canteli y su equipo ha desembocado en un conflicto que está pasando una factura muy alta a la calidad del servicio.

El Grupo Municipal Socialista exige al PP y Ciudadanos que de una vez por todas asuman su responsabilidad y tomen las medidas necesarias para poner fin al rápido y penoso deterioro que está viviendo el servicio del albergue de animales en los últimos meses y que, evidentemente, repercute en la calidad de los cuidados que se ofrecen a los animales.

Los y las socialistas creemos que desde el equipo de gobierno no se está haciendo absolutamente nada para comprobar la situación ni tampoco se están adoptando medidas para corregirla. Exigimos que se escuchen las denuncias y se tomen medidas inmediatas mediante la apertura del correspondiente expediente y, si es el caso, la exigencia de las responsabilidades a que haya lugar.

La situación que ese está viviendo en el albergue de animales es fruto de la pésima gestión del gobierno del señor Canteli y un ejemplo más de cómo se están desmantelando algunos servicios municipales, como consecuencia del oscurantismo, la falta de previsión y nula capacidad del equipo de gobierno para conseguir consenso en temas de trascendencia para la ciudad. El recurso constante a la mentira y la propaganda no representa una solución real a los problemas.

Después de semanas de protestas ciudadanas, Ignacio Cuesta asumió las competencias sobre el albergue de animales en detrimento de su compañero José Luis Costillas y prometió megáfono en mano que el albergue sería una referencia en España. Recurrió a contratar a una Fundación con el fin teórico de recuperar uno, tan solo uno, de los empleos perdidos para supervisar el correcto cumplimiento del contrato por parte del nuevo gestor y también para redactar unos nuevos pliegos antes de la finalización de la primera prórroga, en enero de 2022. A día de hoy tal contratación no se ha producido, y todas las trabajadoras han acabado en los juzgados para defender sus derechos a pesar de haber manifestado el Sr. Cuesta que “no toleraría” ningún despido.