Cientos de personas se han dado cita esta tarde en la plaza de La Escandalera en respuesta a la convocatoria del Grupo Municipal Socialista para defender la permanencia de los bancos arcoíris como un símbolo de «igualdad, respeto a la diversidad y libertad.» La concejala Marisa Ponga agradeció a todos los presentes su presencia y su compromiso y anunció que el Grupo Socialista seguirá movilizándose para reclamar la permanencia de los bancos.
Ponga acusó al bipartito de no entender que en la capital de Asturias hay gente «que tiene más manera de vivir». «¿Qué daño hacen a la ciudad unos bancos que representan derechos?», preguntó en relación a la retirada de los bancos LGTBI de La Escandalera. La edil socialista acusó a Canteli de haberse «quitado la mascara. Primero se escondía en un criterio técnico y en la remodelación de la plaza, ahora anuncia un gasto que es una cortina de humo y que tiene el objetivo único de quitar los bancos arcoirís».
La directiva de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Oviedo (FAVO) Carmen Barbosa fue la encargada de dar lectura a un manifiesto que a continuación se reproduce:
MANIFIESTO EN DEFENSA DE LOS BANCOS ARCOIRIS EN LA PLAZA DE LA ESCANDALERA
Lo primero, gracias por acompañarnos esta tarde en esta plaza de La Escandalera que se ha convertido en un símbolo. Éste es desde hace siglos el lugar en el que las gentes de Oviedo montaban escandalera por la razón que fuera, un nombre que evoca la palabra, la reivindicación y libertad. El mejor lugar para ubicar otro símbolo: los bancos arcoíris. Un recordatorio silencioso y permanente de que somos una ciudad comprometida con la igualdad, con el respeto a la diversidad y con los derechos humanos.
Después de una historia marcada por la oscuridad y la represión el movimiento LGTBI ha luchado durante décadas para que la sociedad acepte y no discrimine a nadie por su identidad sexual. Una normalidad y naturalidad esperanzadoras, que poco a poco y gracias a una sociedad abierta, democrática y cada día más libre de prejuicios, estamos consiguiendo entre todos y todas.
Los bancoíris de La Escandalera nacieron por eso, por una cuestión de orgullo. No solo del Orgullo LGTBI, que celebramos a finales de junio, sino como orgullo de toda una ciudad y un municipio que quieren que la igualdad se vea y se palpe en sus calles. Tenemos y debemos sentirnos orgullosos de gritar y defender que en Oviedo cabe todo el mundo, no sobra nadie, que Oviedo es una ciudad diversa, abierta y plural. Una ciudad de todos los colores, como el arcoíris.
Por eso estamos hoy aquí, para reivindicar que nuestra ciudad no vuelva al blanco y negro. Para decir que queremos que los bancos arcoíris sigan donde están, en el corazón de esta plaza de La Escandalera. Expresando con su colorido la alegría de la libertad. No podemos permitir que se dé un solo paso atrás en las conquistas conseguidas con el esfuerzo y el sufrimiento de muchas personas.
Todas las personas somos iguales. Nadie tiene derecho a juzgar a nadie, a creer que puede borrar otras miradas, otras formas de vivir con una brocha. Los bancos arcoíris son ya parte de la identidad de los ovetenses y del paisaje de Oviedo. Son un icono de la libertad, la igualdad y el respeto a la diversidad. Ése es el Oviedo que queremos y por eso los bancos deben quedarse.