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Los resultados de la liquidación ponen de manifiesto que el Ayuntamiento de Oviedo es cada vez más incapaz de emplear sus recursos económicos, que se quedan en los bancos en vez de emplearse atender las necesidades de la ciudadanía.
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A juicio de las y los socialistas ovetenses, se pone de manifiesto que “las cuentas de Canteli no coinciden con sus cuentos”, con una inversión mínima y un remanente que supera ya los 109 millones de euros.
La parálisis del municipio es palmaria. Los datos que recoge la liquidación presupuestaria correspondiente a 2021 reflejan claramente la nefasta gestión realizada por el bipartito en el último ejercicio. Mientras las vecinas y los vecinos de Oviedo/Uviéu pagan religiosamente sus impuestos, el bipartito del señor Canteli es incapaz de gastarlo para atender sus necesidades.
El Grupo Municipal Socialista denuncia que el nivel de ejecución del presupuesto de gastos no alcanzó el 78%, lo que supone uno de los más bajos de la última década. A pesar de la propaganda de todo tipo con que la derecha intenta desviar su inacción, los números ponen de manifiesto que nuestro Ayuntamiento apenas ha invertido en el último ejercicio siete millones de euros de los más de 30 previstos. A esto se suma el crecimiento desbocado del remanente de tesorería, que ha pasado de 92,7 millones de euros en 2020, a 109,3 millones de euros en 2021.
El Ayuntamiento aumentó sus ingresos durante el año 2021 en 8,6 millones de euros mientras que los gastos lo hicieron en poco más de cuatro millones. A ello hay que añadir todo el dinero que permanece en las entidades bancarias y que no para de incrementarse desde que se inició el presente mandato, pasando en los últimos tres años de 60 a más de 121 millones de euros.
La gestión del señor Canteli no existe porque los contratos se paralizan. El simple mantenimiento se ha convertido en una pesadilla con meses de espera para resolver cuestiones como la conservación de la señalización viaria, y la de aceras y de pavimentos entre otras. Las obras se atascan una tras otra y se hacen eternas. Además, hay servicios municipales que funcionaron sin problemas durante años y que sin embargo ahora pasan por su peor momento, con cierre de instalaciones incluido.
Tanto el PP como Ciudadanos se escudan en la pandemia para tratar de justificarse. La situación a la que están abocando a nuestro municipio nos lleva al absurdo que representa el presupuesto para 2022, aún pendiente de aprobación definitiva, en el que se prevé gastar 240 millones de euros (teniendo ya en el banco guardados 121 millones a la vez que se piden algo más de 19 millones prestados a los bancos).
En opinión del Grupo Municipal Socialista, que el dinero municipal se quede en los bancos y que cada año se vaya incrementando sin repercutir en la ciudadanía, da cuenta de la ineficiencia en la gestión del señor Canteli, más si cabe cuando el Gobierno de Pedro Sánchez ha flexibilizado las condiciones de gasto de las administraciones locales, suprimiendo en los dos últimos ejercicios los límites representados por la llamada «regla de gasto», precisamente para que los ayuntamientos puedan hacer frente a las peores consecuencias de la pandemia.
La liquidación presupuestaria del ejercicio 2021 ha puesto de manifiesto que las cuentas de Canteli no coinciden con sus cuentos ni con el relato triunfal que hace cada día. Nuestra población y el tejido económico se enfrentan a las consecuencias derivadas de la crisis de la COVID-19 sin respaldo municipal. Mientras las vecinas y los vecinos cumplen con sus obligaciones tributarias, lamentablemente reciben cada vez menos prestaciones del Ayuntamiento por estar en manos de un gobierno como el del señor Canteli, totalmente inoperante.